Antes de
que termine el mes de mayo quiero presentar en mi blog a una de mis Cucas, mi pequeña de FAMOSA que allá por mediados de
los 70 se puso un bonito vestido blanco y se comulgó, como tantas otras niñas
de su época.
No puedo
evitarlo, las Cucas son mi debilidad y os iré hablando de ellas porque hay
muchos aspectos de esta moña poco
conocidos. De la de hoy se puede decir que viste un vestido con
sobre-cuerpo de encaje y que lleva el característico velo sobre su melena
rubia. Las Cucas de pelo largo lo llevan
recogido en dos coletas pero esta lo luce suelto. He
encontrado la fotografía de otra Cuca con el mismo modelo pero en versión pelo
corto y rizado (como la Cuca Caperucita y la enfermera) e igualmente
FAMOSA sacó al mercado otra Cuca Comunión con hábito blanco, cruz de
madera colgada al cuello, medias y zapatos blancos.
Para las
niñas que tomaban la primera comunión era habitual (y sigue siendo) recibir una
muñequita también comulgante. Era un regalo que solía conservarse más como
recuerdo que como muñeca de juego y muchas han llegado a nosotras. Por supuesto
no faltan en toda colección que se precie. (Fotografías
de TodoColección).
De esta
Caperucita Roja sé muy pocas cosas: hecha en goma tipo vinilo pesa bastante
y no va marcada, mide 28 cms y parece de U.S.A. Está articulada en la cabeza,
los brazos y las piernas y va bien vestida, con una caperuza que me gusta
especialmente porque es como la que sale en los cuentos antiguos.
Su cabello
castaño está injertado y es abundante, enmarcando una carita muy bonita. Y allí
están los ojos verdes basculantes con las pestañas superiores tupidas y las inferiores pintadas, como también lo están las cejas que imitan a las antiguas muñecas de
porcelana. Son curiosas ¿verdad?
En fin, que
espero poder bautizarla algún día. De momento pasa a formar parte de mi cada
vez más numeroso grupo de Capes.
Los muebles
en miniatura son un juguete clásico con el que hemos jugado muchos niños de
diferentes generaciones. La cama y la butaca de madera que os presento hoy
fueron hechas en la década de los 60 por
Sendra, una empresa de Denia (Alicante). Las encontré en los Encantes de
Barcelona ya hace unos años y no debieron ser jugadas. La camita (que es
plegable) conserva la etiqueta, las calcomanías de flores que la decoran y las tablas de madera del somier y reproduce el antiguo modelo de cama con cabezal y pie.
Juguetes Sendra fue fundada en 1964 por Jaime Sendra y Timoner que ya venía de
la industria del juguete. Era concesionario de algunos productos de Disney, de
la familia Telerín y de otros personajes infantiles famosos en aquella época e hizo
muchos juguetes de madera: castillos, fuertes del oeste, arrastres, cocinitas,
garajes, casitas de muñecas, muebles; pero también en metal y plástico como
triciclos, bicis, motos, coches de pedales y karts. En 1978 los tres hijos de don Jaime entraron
en el negocio pasando a llamarse “Juguetes Sendra S.A.” y se distinguieron por
ser innovadores en los sistemas de tracción de los vehículos de juguete que
fabricaban. Una buena parte de su producción se exportaba en los años 80 a
Europa, norte de África y Oriente Medio.
Por estas “causalidades” que tiene la vida, un
aragonés a quien aprecié mucho, Antonio Gella, me hizo una reproducción en
miniatura de un antiguo colchón. Antonio se había dedicada gran parte de su
vida a hacer jergones de lana de forma artesanal cuando los de espuma no
existían; una vez jubilado quiso coser a la manera tradicional unos
colchoncitos de recuerdo para su familia y para mi sorpresa no sólo me regaló uno a mí sino que además
era perfecto para mi camita de madera. Por supuesto este dormitorio ha pasado a ser uno de mis juguetes preferidos.
(Parte de la
información la ha extraído del libro-catálogo Els Joguets de Dénia que os recomiendo para conocer la interesante
industria juguetera de esta población).
Linda Susi Susuki es una
muñeca poco conocida porque se confunde casi siempre con su hermana Linda
Pirula y a menudo pasa inadvertida entre quienes coleccionamos muñecas.
Además es casi idéntica a la Muguette francesa de la casa Bella (aunque esta va
marcada en la espalda y Susi no, solo en los zapatos que rara vez conserva) y
una vez más no sé si fue copiada o se hizo bajo licencia de la firma francesa.
De lo que no hay duda es de que su parecido es enorme y además las fechas cantan:
Muguette nació en 1954, Linda Susi Susuki en 1955 y solo dos meses más tardeera registrada
Linda Pirula. No acaba aquí el juego de parecidos porque Mariolin de ICSA y
Bombón de Florido se parecen muchísimo e incluso años después Ramón Inglés hizo
una en porcelana que recuerda a todas ellas. Sin duda Muguette dejó huella en
la muñeca española (podéis saber más de la francesita en una entrada anterior
que hice sobre ella).
La pequeña
Susi fue registrada por el señor Carlos Hernández de Alba y Gómez de “Muñecas
El Alba”, Valencia, y pudo ser la primera muñeca de
una serie que llevo un tiempo siguiendo y
de la que hablaré otro día, porque hay para rato. La moña más famosa de El Alba sería la
citada Linda Pirula, más que hermana casi gemela. De hecho, de no tener a las
dos juntas y sobre todo, de no conservar los zapatos marcados de la primera, es
difícil distinguirlas. Solo una pequeña diferencia de altura nos ayuda a saber
cuál es cuál: Susi mide 24,5 cms y Linda Pirula 25,5, aunque algunos modelos de
Pirula son un poco más altos y esa pequeña diferencia se aprecia mejor.
Las
características de mi mulata son estas: cabeza unida al tronco y articulada en
los brazos y en las piernas mediante gomas; hecha en un material muy parecido
al celuloide pero algo más duro que se pintó para conseguir el tono tostado de
su piel, veréis las marcas de pintura en la fotografía inferior (he visto que a veces la describen como fabricada en celuloide, pero no
creo que lo sea); peluca natural; ojos flirty; son originales el vestido y el
calzado marcado en la suela. Se
ven menos mulatas que de piel clara y las hay rubias y castañas en varios tonos, siempre con peluca
natural y peinadas con trenzas, rodetes o media melena. Llevan cortos y alegres
vestidos de calle, sus zapatos son siempre blancos en el mismo modelo que las
Bellas francesas.
Fue lo primero que pensé cuando vi a esta
pequeña. Efectivamente mi muñequita griega o romana lleva marcado en la nuca THE
LONELY DOLL, DARE WRIGHT y en la espalda y en el culete, 1989 KIDS AT HEART,
MELTON. Fue fabricada en España por White Balloon, empresa que trabajaba para
varios artistas, entre ellos los Melton, pero creo que no se distribuyó aquí.
Deduzco que formaría parte de una serie de muñecas históricas porque la mía es de
la antigüedad clásica y una compañera coleccionista me proporcionó la
fotografía de otra “muñeca solitaria” vestida de egipcia que está a la venta en
TC. ¿Alguien conoce más sobre esta colección?
La original fue Edith, más conocida como “The
lonely doll” (la muñeca solitaria) y era realmente una muñeca Lenci de fieltro
que perteneció - desde su infancia – a la
escritora para niños, modelo y fotógrafa canadiense-norteamericana Dare Wright,
quien en 1957 publicó el primer libro de fotografías dedicado a su pequeña moña (después vendrían dieciocho libros más).
Edith parecía cobrar vida en cada una de las imágenes, muchas veces acompañada
de dos ositos, sus inseparables amigos gracias a los cuales había pasado de ser
una niña que estaba siempre sola a vivir mil aventuras. Aunque
ahora sea muy común entre algunos coleccionistas hacer este
tipo de fotografías donde pretendemos dotar de vida a nuestras moñas, no lo debía de ser hace 60 años siendo Dare Wright una precursora. Os animo a comprar alguno de sus libros – yo
tengo el primero – o a buscar sus
fotografías en internet y disfrutar de las imágenes llenas de sensibilidad, imaginación y
belleza. Pongo algunas al final de esta entrada.
Mi Edith morena es de vinilo y mide 24 cms de
altura. Su cabello castaño es abundante y
comparte con algunas Lenci la mirada a un lado y la carita armoniosa,
aunque de semblante serio. Llaman la atención las grandes manos y los pies
desproporcionados que calza con sandalias.
El collar, el vestido y el calzado son originales. Como a la Lenci Edith
le acompañan dos ositos, el mayor es un Steiff de 1988 y la pequeña es una
simpática osita de solo 5,5 cms.