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11 de octubre de 2019

Dos muñecas Shirley Temple


Pizpireta, torbellino, dulce, polifacética, alegre, imaginativa, fotogénica, simpática, expresiva, sonriente, encantadora, vital … y muchos otros adjetivos se podrían aplicar a la actriz Shirley Temple.



Nacida en 1928 en California desde pequeña asistió a clases de canto, baile y teatro y a muy corta edad comenzó a trabajar en el cine interpretando personajes secundarios. Solo tenía seis años  cuando hizo su primer papel como protagonista y a los pocos meses  recibió el Oscar convirtiéndose en la actriz más joven que lo ha ganado. A partir de allí encadenó un rodaje con otro y los éxitos se sucedieron: era la intérprete infantil más querida del mundo del cine. Sus compañeros de trabajo destacaban su gran profesionalidad que llamaba la atención viniendo de una cría.



No debió ser fácil crecer siendo una niña prodigio y su carrera fue corta, se retiró en 1949 a los veintiún años de edad. Para entonces ya se había casado, había sido madre de una nena, se había divorciado y estaba a punto de contraer un segundo y largo matrimonio del que nacerían otros dos hijos. Pasado el tiempo la diplomacia llamó a su puerta y trabajó como embajadora de su país, Estados Unidos de América. Murió en 2014 poniendo fin a una vida que desde luego no fue muy convencional.



Vamos a lo nuestro,  a hablar de muñecas. No soy una especial seguidora de esta actriz pero se hicieron tantas moñetas bonitas a su imagen y semejanza que con el tiempo he adquirido dos. La primera es esta pequeña de composición que mide 30 cms. Su peluca es original, tipo mohair y fijaros en sus famosísimos rizos de los que luego hablaré. Tiene dientes, ojos verdes, mejillas sonrosadas y se articula en cuello y extremidades. A destacar lo delgadito  y esbelto que es el cuerpo para representar a una niña pequeñita y lo descompensado que está respecto  a la cabeza, pero es así de origen. Lo que no parece original es la ropa interior, el vestido y el calzado. La dato en los años 30-40.




Lleva su nombre grabado en la espalda y el número 11. Desconozco su fabricante pero si hay una compañía asociada a la actriz es la empresa norteamericana Ideal Dolls quien vio muy pronto el enorme potencial de la estrella infantil y se puso manos a la obra. Conseguir los derechos para reproducir la muñeca Shirley Temple no fue fácil. Conscientes de la importancia de firmar ese contrato tuvieron que negociar durante seis meses con los padres y los agentes de la actriz. Su madre fue especialmente rigurosa exigiendo que se reprodujeran detalles muy específicos en las moñas,  como que tenían que tener exactamente cincuenta y dos rizos y los ojos de color avellana, ni azules ni marrones, como solían tener otras muñecas. La creación de Ideal Dolls debía ser  una copia fiel de la pequeña Shirley.




Como se puede ver, mi muñeca no tiene los ojos avellana, así que no parece hecha por esta empresa, pero tampoco lo descarto.



Finalmente el acuerdo se llevó a cabo y las dos partes debieron quedar satisfechas: los Temple recibieron enormes royalties durante muchos años e Ideal Dolls sacó al mercado millones de pequeñas Shirleys desde 1934, en diferentes series.  Ninguna actriz ha debido tener tal cantidad de pequeños clones. A cada estreno correspondía una nueva moña o bien se reproducían los vestidos que había lucido en la producción cinematográfica. Es relativamente fácil encontrar estos modelos icónicos de vestuario y también las propias muñecas, sobre todo en el mercado norteamericano donde hay legiones de coleccionistas de todo lo relativo a ella. Por supuesto se hicieron multitud de objetos con su imagen, un gran éxito de comercialización entre un público que la adoraba.



Mi segunda moñeta es posterior, de 1972. Su altura es de 35 cms y está hecha en vinilo de buena calidad. Los brazos y la cabeza son algo más blandos que el resto del cuerpo. El pelo está injertado y pasó por la peluquería para ponerse aún más guapa. Sus ojos son grandes y de color avellana-miel, la naricita respingona, la boca pequeña nos muestra cuatro dientes y también vemos los hoyuelos. Si la anterior muñeca representaba a una Shirley pequeña, esta ha crecido y tiene algo de pecho.






La ropa interior y el vestido son originales, este último va marcado “Made in Hong Kong” como la propia muñeca. Aún siendo una empresa norteamericana, fabricaba en la entonces colonia británica.



Buscando información me encuentro con que el atuendo que lleva pertenece a la película “Heidi” rodada en 1937. Añado el cartel anunciador, otra imagen donde vemos a la actriz con el mismo vestido rojo y una escena con su amiga Clara que sostiene a una gran muñeca sobre sus piernas.







El recortable de Ediciones “La Tijera” es uno de los que tengo de esta actriz, un complemento perfecto para mi pareja de muñequitas y que fue un juguete muy querido especialmente por las niñas ¡cuántos buenos ratos pásabamos recortando! Me quedo probándole vestiditos de papel.



*  Todas las fotografías con el nombre de mi blog están hechas por mí. En virtud de la ley de propiedad intelectual, está prohibido usarlas sin mi consentimiento. Si las necesitas, ponte en contacto conmigo 😉

*  El resto de las imágenes son de Ebay y de Amazon.

* Te puede interesar ver a mi muñeca Shirley en la peluquería   http://misjuguetesymognas.blogspot.com/2018/01/una-peluqueria-de-munecas.html












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