Mostrando entradas con la etiqueta Berjusa. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Berjusa. Mostrar todas las entradas

15 de noviembre de 2021

Ángeles o demonios: muñecos enfadados

 

Cualquiera que haya cuidado a un bebé sabe que son seres angelicales  y sonrientes. Tienen esas caritas redondas con expresiones tranquilas, transmiten paz, vamos, que dan ganas de tenerlos en los brazos y acunarlos.


Conocedoras de esto las empresas jugueteras han reproducido hasta la saciedad el ideal de bebito dulce al que otros niños, los de verdad, cuidan, dan de comer, acuestan.


Y es que son así casi siempre … pero en cuestión de segundos pueden cambiar de expresión para convertirse en pequeños diablillos llorones. Da igual si les ofreces leche, les cambias de pañal o incluso les das un juguete. Están enfadados y te lo hacen saber de forma ruidosa.


Así que hoy os presento a dos ejemplos de estos muñecos menos apacibles.


El de mayor tamaño es de Florido, la casa madrileña que me gusta tanto y de la que he hablado en otras ocasiones. Añadiré algunos enlaces al final con varios muñecos de esta empresa.

Este baby enfadado se fabricó enteramente en Plastisol y se anunciaba en la revista Juegos y Juguetes de España en 1964. Inusualmente no va marcado como otros de la misma casa y ni siquiera tiene nombre. He visto muy poquitos como él, quizá la producción fue corta o no fueron muy exitosos pese a que la compañía apostó claramente por él al anunciarlo en solitario.


Observaréis que el chiquitín de la imagen publicitaria está perfectamente peinado. Por el contrario el mío, con el disgusto que lleva, tiene su cabello (más largo) muy alborotado y ha sido imposible domarlo. El pañal es de origen.


Como dato curioso os cuento que el sistema de unión no es el habitual en las muñecas españolas donde el cabeza y cuello se insertan en el cuerpo. En este caso, es la parte superior del tronco la que entra en la cabeza.



Este detalle me lleva a pensar que la firma madrileña pudo comprar la patente e incluso los moldes de un muñeco extranjero. Generalmente este sistema se ha utilizado en el Reino Unido, no sé si también en otros países. No he encontrado un moñaco de estas características inglés pero sí una italiana de nombre Camilla Strilla parecida de la casa Sebino cuya imagen añado. Por otra parte no es el único muñeco de Florido con esta característica.

 


Pasemos al bebé pequeño, una repro cerámica que me vistió mi tía Tere. En este caso es un muñequito de dos caras. Quizá los habréis visto incluso de tres caras. Esta idea de “dos o tres muñecos en uno” viene de antiguo.


La forma de tener un aspecto u otro es tan sencilla como hacer girar la cabeza sobre el tronco para que pase de ser un pequeño demonio a un angelito o viceversa.


Bebés con dos facciones se han frabricando y se siguen haciendo, solo pongo como ejemplo a Berjusín de Berjusa (siguiente fotografía) pero hay varios más en la industria muñequera española. Y desde luego se han hecho muchos niños llorones, añado a un Tortuga alemán muy similar al mío y a un pequeñajo japonés que es un mar de lágrimas.





Cierro esta entrada con Titín, protagonista de un cuento. Lo tengo entre mi colección de cuentitos troquelados pero con la tapa estropeada así que tomo una imagen de TC para veáis lo chulo que es y amplío con una mía del interior. 



Ayyy, pobre Titín.



Estas antiguas entradas del blog referidas a Florido pueden gustarte, en la primera conocerás a Brisitas, que fue mi entrada al blog (pincha justo AQUÍ ). Conoce a Pompito bañista (pinchando EN ESTE PUNTO) y a sus hermanas, Pompitas orientales (AQUÍ)

 

¿Quieres comentarme algo? estaré encantada de leerte, puedes hacerlo abajo. Aclaraciones, aportaciones y preguntas son bienvenidas.

 

Casi todas las fotografías de esta entrada están hechas por mí. En virtud de la ley de propiedad intelectual está prohibido usarlas sin mi consentimiento. Si las necesitas, ponte en contacto conmigo 😉. El resto son de Todo Colección y de Ebay 


Algunos datos están extraído del libro FLORIDO de Carmen López de Lerma.  Muy recomendable.


13 de enero de 2018

Heidi de Berjusa

Esta Caperucita tiene algo de especial, la recibí como regalo de cumpleaños y al verla lo primero que pensé fue en la Heidi de los dibujos animados.


Hagamos memoria. Johana Spiry fue una escritora suiza que en 1888 publicó un libro sobre una niña huérfana que vivía con su abuelo en los Alpes. Su personaje, Heidi, pronto fue muy querido y ochenta años después en Japón se hizo una serie de animación que aquí vimos en 1975. El éxito fue inmediato y varias firmas jugueteras sacaron al mercado productos basados en ella. Berjusa también y posiblemente ese mismo año o al siguiente, 1976, hizo su propia versión en forma de muñeca.





Parece que quisieron aprovechar el lanzamiento y la sacaron con distintos trajes. Además de la Heidi citada hubo una muñeca colegiala y otra de comunión. ¿Y mi Caperucita? Su vestido lleva etiqueta de Berjusa, con el número 58, pero no he visto hasta ahora a ninguna otra igual ni tampoco fotografía de catálogo, así que creo que es original pero no lo aseguro. Los zapatos son de origen.







Mide 33 cms de altura, se publicitaba como “muñeca andadora eléctrica” y la unión de la cabeza y el cuello está quemada por el mecanismo, que tenía una pila alojaba en la espalda. Algunas otras que he visto sufrieron el mismo problema. Los brazos y la cabeza son de goma (el izquierdo no es original) y el cuerpo y las piernas son de plástico duro. No va marcada. La carita es preciosa, con los ojos tan parecidos a los del personaje televisivo y esa expresión de niña inocente y buena que tanto gustó cuando de niños vimos la serie. Nos sentíamos identificados con ella, ya lo decía el lema de Berjusa:
 ♪♪ Muñecas como tú ♪♪