7 de diciembre de 2018

Dos Cucas en Suiza


No hay nada que me guste más que visitar a mis amigos y pasar unos días con ellos recordando viejos tiempos, disfrutando del momento y haciendo más planes futuros juntos, así que tras la llamada de Heidi y Pedro “Cuca Cape ¿por qué no vienes a vernos?” decidí  que había llegado el momento de viajar hasta Suiza.



Experiencia en viajar tengo y mucha. Era muy pequeña cuando mi irresponsable madre me mandaba a cruzar solita el bosque para llevar unas galletas a mi abuela, que digo yo que podría haberle mandado un paquete o cogido el coche y hacerlo ella misma sin exponerme a los peligros que me acechaban, por no hablar de mi padre siempre ausente en los cuentos … pero bueno, que esta es otra historia y algún día volveré a ella. Como decía, que me las sé apañar muy bien y sin perder un momento miré la bola del mundo para ver el camino  e hice la maleta, porque en la cesta no me cabía todo. Cuca Coletas se apuntó a última hora y nos pusimos en marcha.





Tras una parada en Nimes para descansar y conocer su pasado romano nos plantamos en Gruyères que es un pueblecito medieval muy pintoresco del cantón de Friburgo. En la plaza nos esperaban nuestros amigos súper contentos con nuestra llegada. ¡Cuántos abrazos nos dimos! Estaban como locos por enseñárnoslo todo “Cuca, te presento al Viejo de los Alpes, mi abuelito ¿a que es alto? y aunque parezca serio es muy cariñoso. Mira la plaza de mi aldea, qué bonita es, siempre hay muchos turistas. Cómo han cambiado las cosas, antes vivíamos casi aislados y ahora está lleno de restaurantes y tiendas.”







Unos minutos después estábamos en el castillo que allí llaman château, me encanta escribirlo en francés porque su acento circunflejo ^ me recuerda a mi gorrito rojo. Pagamos la entrada, nos dieron una pegatina identificativa y lo recorrimos de arriba abajo.



Mientras tanto Pedro enseñaba sus propiedades a Cuca Coletas: “gracias a mi madre y a mi abuela aprendí a hacer quesos, después el abuelito de Heidi me enseñó un oficio y me ayudó con los deberes de la escuela, yo pensaba que no valía para eso pero con la ayuda de todos y en especial de mi amiga pude mejorar, así que cuando acabé mis estudios trabajé mucho y conseguí tener mi propio rebaño de vacas, mira, aquí tenemos al perro Niebla que todavía nos ayuda con el ganado. Ven a ver mi fábrica de quesos, me he convertido en un hombre de negocios, quién me lo iba a decir a mí”.







Heidi por su parte me contaba las excelencias de su país “no te creas que todo son bancos, relojes, chocolates, quesos, prados y cabras, los suizos somos buenos haciendo muchas otras cosas, por ejemplo navajas,  deberías comprarte una multiusos y llevarla en tu cesta, con lo que tú transitas por los bosques te sería de gran utilidad…” Pero más que en las navajas yo estaba interesada en estos rompecabezas tan bonitos de madera que contaban mi historia, hay que ver lo conocida que soy en todas partes.  “Oye, bien pensado compraré una de esas navajas para regalársela a mi amigo el leñador, que buen favor me hizo cuando tuve el famoso percance con el lobo malo”.





Al día siguiente lucía un sol fantástico y decidimos subir a un glaciar de los Alpes en un enorme funicular, guauuu, qué impresión ascender en ese cacharro, nos sentíamos muy  pequeños. Una sorpresa nos aguardaba en el interior del aparato, el conductor tenía un muñeco hecho a su imagen y semejanza, ¡eran igualitos! “¿Nos podemos hacer una fotografía contigo?” “¡Claro, me encanta ver a otros muñecos por aquí!  ¿de dónde decís que sois, chicas?”



Pero al llegar arriba el miedo se apoderó de mí, la altura era tremenda, mirar abajo era ver el vacío, las grandes moles de roca me impresionaban y encima esa pasarela que Pedro me invitaba a cruzar me daba mucho respeto. Pero una Cuca Cape no se amilana por cosas tan pequeñas y una vez que la crucé, la vista de la cordillera era tan tan tan maravillosa que todo había valido la pena, porque yo amo mis Pirineos pero los Alpes cortan la respiración.







Era momento de divertirnos en el glaciar ¿os imagináis jugar en la nieve en pleno verano? Estábamos como niños con zapatos nuevos: Cuca Coletas quería hacer el angelito moviendo sus brazos pero Pedro propuso “¿y si hacemos dos muñecos..?”.  Me pregunto dónde he oído yo esa canción.





Heidi vino a sacarme de mi ensoñación, “chicos, va cayendo la tarde y hay que bajar, las montañas son muy traicioneras y en unos minutos podría caer una tormenta”.  Nos dispusimos a regresar no sin antes despedirnos de las alturas y del mítico Mont Blanc, estábamos muy contentas de haber podido conocer uno de los techos del mundo.





Tal como había previsto nuestra amiga Heidi, las nubes grises aparecieron pronto pero ya estábamos abajo a salvo así que dimos un paseo por allí y nos hicimos unas fotos de recuerdo. Como Cuca Coletas es tan romántica y le encantan las flores, no hay más que ver su vestido primaveral,  cogió algunas para adornarse el pelo, estaba guapísima.





“No os podéis ir del país sin visitar Zúrich” dijo Pedro. Dicho y hecho, fuimos a esta ciudad, centro económico de Suiza que mantiene su precioso casco histórico junto al lago. Paseamos  por sus calles, cogimos el tranvía y aún tuvimos tiempo de entrar en algunas jugueterías. A mí me encantaron esos autómatas de madera musicales pero Heidi se inclinaba por comprar unas postales “mira, aquí estoy en las montañas con mi abuelito, está mi amiga Clara y todas nuestras cabritas: Blanquita, Bonita, Diana, Copo de Nieve y Salvaje”  y junto a Pedro nos mostró varios relojes cucú que tan tradicionales son por esas tierras.









Nuestra última excursión fue al castillo de Chillon construido junto al lago Lemán. Con nuestros amigos teníamos una broma todo el tiempo que era llamarlo “castillo de Gritón”, cosas de niños … Es un château que atrae todos los años a cientos de miles de turistas por su emplazamiento y su singular belleza. Ya en el pasado fue visitado por Rosseau, Víctor Hugo, Alejandro Dumas, Gustave Flaubert y Lord Byron que situaron algunas de sus historias entre los muros de esta fortaleza que a nosotras nos dejó pasmadas y con la boca abierta. 







Pedro se situó junto a la maqueta para darnos una lección de arquitectura e historia, después descubrimos que entre el mobiliario antiguo había un arca pequeñísima de nuestro tamaño ¿vivió alguna de mis antepasadas Cucas en Chillon?, quién sabe. De eso estuve hablando con Heidi sentadas en el vano de una ventana admirando el inigualable paisaje.


Ahora sí que nuestro viaje tocaba a su fin y la última noche hicimos una fondue con los quesos que fabrica Pedro ¡qué risas!  Cuca Coletas casi se cae dentro de la cazuela ¡¡le gusta el queso más que a los ratones!!



Nos despedimos de nuestros amigos suizos con la promesa de que pronto vendrían a vernos a España y llevando en nuestra retina los maravillosos paisajes suizos. Hasta muy pronto.





* En esta aventura han participado Cuca Caperucita, Cuca Coletas (ambas de FAMOSA) y como artistas invitados Heidi y Pedro de Mecánica Ibense M.I.




* Excepto la última imagen que es de TodoColección, todas las fotografías son mías y no pueden reproducirse sin mi consentimiento.


* Otra Cuca / Heidi  de mi colección es esta http://misjuguetesymognas.blogspot.com/2018/01/heidi-de-berjusa.html

* Si quieres saber más sobre el Museo Romano de Nimes este es el enlace:
http://misjuguetesymognas.blogspot.com/2018/10/juguetes-en-el-museo-romano-de-nimes.html




30 de noviembre de 2018

Feria de muñecas y osos en Kensington, Londres


Hace tan solo unos días se celebró esta importante feria y tuve la suerte de visitarla y pasar unas horas rodeada de maravillosas muñecas, preciosos osos de peluche y algunos juguetes que hubiera estado encantada de incorporar a mi colección. Era la tercera vez que se celebraba este evento londinense “200 Years of Childhood” que reúne una gran variedad de piezas, especialmente muñecas de porcelana de los mejores fabricantes.



Esta feria no es solo una exposición y venta de objetos, es además un lugar de estudio donde los organizadores, en unión al Doll Club of Great Britain, el club de muñecas de Reino Unido, organizan seminarios a lo largo del fin de semana que profundizan en el conocimiento de esta afición además de intercambiar experiencias con expertos y coleccionistas de otros países, por ejemplo entre los invitados estaba el  francés Samy Odin que era el propietario del Museo de la Muñeca de París, actualmente cerrado y que ha escrito varios libros sobre las muñecas francesas.




La feria casi coincidió con una fecha muy importante para los ingleses, el centenario de la firma del armisticio de la Primera Guerra Mundial que tuvo lugar el 11 de noviembre de 1918. Este aniversario se vive con mucho respeto y pasión en este país y por tal motivo a la entrada del recinto una pequeña exposición de muñecos y algunos juguetes nos recordaban los duros momentos vividos en casi toda Europa. Al fondo de una de las imágenes se ve una corona de poppies o amapolas que son el símbolo de los soldados caídos. Un conjunto que me llamó mucho la atención fue el de un policía deteniendo a una mujer que pide el derecho al voto. Como siempre los juguetes reflejan la sociedad del momento.











Por partes, primero mostraré imágenes de las muñecas de porcelana que eran las reinas. Había otros ejemplares que no eran de este material, algunas de cera, también antiguos ejemplares de madera, pocas de composición y de papel maché, varias de tela (principalmente Lenci, Käthe Kruse, unas pocas Roldán y Klumpe españolas y algunas conocidas marcas inglesas como Norah Wellings, Chad Valley o Deans) y muy escasas las de materiales plásticos, tan solo algunas inglesas de los años 50 entre las que reconocí a unas delicadas Rosebud y a unos bebés BND de los cuáles tengo tres en mi colección. Cuatro muñecos Sasha - que son modernos pero tienen un precio elevado - se veían en la esquina de una mesa. Dado que mis moñas preferidas son las de los años 40, 50 y 60 podría decir que esta feria no era para mí, pero todo lo contrario, disfruté mucho al poder ver excepcionales piezas tan ricamente vestidas y con maravillosos complementos a las que pocas veces tengo acceso.

















Quienes conocéis mejor a las porcelanas distinguiréis las principales casas: Bru, Jumeau, Steiner, Kestner, Simon & Halbig, Heubach, Gaultier. S.F.B.J y otras.

Si las porcelanas eran las reinas, los ositos o teddies eran los simpáticos reyes. Los británicos los adoran y son objeto de coleccionismo por parte de muchas personas. Junto a ellos se veían otros peluches de todo tipo, algunos vestidos o acompañados de objetos que les daban más vida. Es increíble comprobar cómo los fabricantes saben dotar a estos animalillos de miradas y expresiones que parecen muchas veces reales.







En casi todas las mesas se veían complementos para las muñecas: sombrillas, ropas, algunas joyas, tocados y sombreros, zapatitos y botas (atención a la caja que estaba llena, qué maravilla), puntillas, pequeños juguetes, mueblecitos, baúles, botones, vajillas, mascotas, etc. Además se podían encontrar pequeños objetos decorativos y miniaturas.





Mis ojos se fueron a algunos juguetitos que eran escasos porque esta no es una feria de juguetes. Los que más me llamaron la atención fueron esta sombrerería fantástica y la pastelería, tengo pasión por las tiendecitas, está claro, lástima que los precios estuvieran fuera de mi alcance.



La parte mediática la iba dando Rachel Hoffman de Rubby Lane que vino con su equipo desde Estados Unidos y transmitió por internet muchos momentos de este evento durante todo el fin de semana. Entre los vendedores había quienes realizan las ventas desde sus propios establecimientos y también a través de este conocido canal y ella los entrevistaba, como vemos en esta imagen. El ambiente me pareció muy agradable con personas venidas de diferentes puntos de Europa y de todo el país, la gente te atendía con amabilidad cuando mostrabas interés por algo y en varias mesas podías suscribirte a revistas y asociarte a clubs de muñecas. Me regalaron varias así que tengo lectura para unos días.



Resumiendo, siempre se aprende algo cuando visitas ferias, museos, exposiciones, anticuarios, subastas, mercadillos. Al mismo tiempo puedes ver, conocer, disfrutar, hablar y escuchar. Todo en uno.

Te pueden interesar estos enlaces:

·         Museo de la muñeca de París 
http://misjuguetesymognas.blogspot.com/2017/09/el-museo-de-la-muneca-de-paris-cierra.html

·         Muñecos BND 
http://misjuguetesymognas.blogspot.com/2018/04/los-trillizos-ingleses-de-bnd.html

Todas las imágenes son de mi propiedad y no pueden ser reproducidas sin mi permiso.