31 de julio de 2024

Anne por dentro, restaurando muñecas

 

¿Tenéis algún muñeco que no está en su mejor momento, que necesita de una reparación? Es una buena oportunidad para conocer cómo fue hecho y de esto os voy a hablar hoy. Vuelvo a mostraros a los hermanos Anne de Käthe Kruse que visteis en mi última entrada (aquí los tenéis).


Volvamos por un momento a nuestra infancia. Muchos de nosotros, de niños, rompimos un par de juguetes para saber cómo eran por dentro. Nos asombraba que hablaran o que se movieran. Me recuerdo preguntándome cómo podía funcionar el biberón mágico con el que daba de comer a mi Tumbelino ¡nunca se terminaba la leche! y cómo, por más que lo intentara, no lograba averiguarlo … hasta que un día lo rompí. Descubrí el misterio pero me quedé sin la magia de mi pequeño biberón. Tras la decepción ya no volví a romper nada más.


Ahora, de mayor, hago lo contrario. Intento arreglar los juguetes rotos y de paso aprender sobre su proceso constructivo, sus materiales y técnicas. Es bastante gratificante cuando lo consigues.


En el caso de la pequeña Anne (25 cms) el trabajo fue hecho por mi tía Tere quien le confeccionó un nuevo cuerpo. En las fotografías estaréis viendo cómo llegó. Conservaba la funda, la tela de color crema pero dentro solo estaban los alambres oxidados de la estructura y la goma espuma totalmente pasada y convertida en polvo.




Descubrimos así que estas muñecas en su versión niña y niño mantienen el espíritu de las primeras Kruse en cuanto a los rasgos de las caritas y también en lo relativo a los cuerpos de tela.


Una Anne con su caja que se vendía en Ebay

Tere conservó la estructura metálica que una vez limpia del polvo naranja y del óxido fue bien forrada. Posteriormente ya se le pudo poner su funda una vez estuvo lavada. Esta imagen que veis a continuación no refleja bien el aspecto final porque aún le puso algo más de relleno.




En el caso de su hermanito el cuerpo estaba en buen estado y no hubo que hacerle apenas nada. Posteriormente los dos pasaron por la sección de costura y con unas telas antiguas y basándonos en los diseños originales de estas moñas ¡voilá! quedaron acabados (ains, les falta el calzado).


Y lo que también acaba es la entrada de hoy, aaaaadiós.


La señora Kruse con algunas de sus bonitas muñecas

 

Como las creaciones de Käthe Kruse me gustan mucho, la traje al blog hace un tiempo. La podrás ver de nuevo en este punto.

¿Quieres comentarme algo? estaré encantada de leerte, puedes hacerlo abajo. Aclaraciones, aportaciones y preguntas son bienvenidas 

Las fotografías de esta entrada están hechas por mí (excepto dos que son de Ebay). En virtud de la ley de la propiedad intelectual está prohibido utilizarlas sin mi consentimiento. Si las necesitas, ponte en contacto conmigo a través de este blog, gracias 😉