Entre mi colección de puzles ingleses tengo dos de tema navideño y estamos en las fechas perfectas para presentarlos. Ambos son de madera y de la marca Victory, una empresa muy prolífica en este tipo de juegos de mesa. Estos deben ser de los años 50, antes de que empezaran a fabricarse en cartón.
Vemos
en el primero que Santa Claus ha ido a visitar a una familia y menuda
algarabía hay en ese comedor. La madre parece ajena a la visita y
arregla el árbol, cargado de juguetes y adornos. Arrodillado en el
suelo un niño abre su regalo, es un osito Teddy
que
estoy segura de que va a ser su preferido.
En el centro el propio Santa hace entrega de un paquete a la niña
vestida de rosa que lo mira asombrada. Detrás, su hermano contempla la escena con
atención, parece estar esperando a recibir su presente porque el
saco está lleno. Y mientras tanto el resto de los niños se
divierte, unos estirando del cracker
y otras jugando con un globo. Qué vestidos tan bonitos llevan todas
las pequeñas.
En
el segundo puzle la Señora Ratona ofrece una fiesta de Navidad. Los
pequeños animalitos juegan hasta que alguien llama a la puerta y
juntos corren a abrirla: ¡es el Señor Cuervo cargado de paquetes y
con una cesta repleta de comida! También la mesa rebosa de
alimentos: un gran pedazo de queso, fruta, tarta, dulces, gelatina,
pasteles y entre ellos, los tradicionales Christmas crackers, esos
cilindros forrados de papel que contienen un regalito y un chiste. Las guirnaldas y el muérdago mágico cuelgan del techo y el
árbol no puede estar más decorado. Por supuesto no podía faltar el
hada que en el pasado siempre estaba presente en el árbol navideño inglés.
Os
deseo en estas fiestas y siempre amor, humor, salud y que no os falte
tiempo para jugar.