¿Tenéis algún muñeco que no está
en su mejor momento, que necesita de una reparación? Es una buena oportunidad
para conocer cómo fue hecho y de esto os voy a hablar hoy. Vuelvo a mostraros a
los hermanos Anne de Käthe Kruse que visteis en mi última entrada (aquí los tenéis).
Volvamos por un momento a nuestra
infancia. Muchos de nosotros, de niños, rompimos un par de juguetes para saber
cómo eran por dentro. Nos asombraba que hablaran o que se movieran. Me recuerdo
preguntándome cómo podía funcionar el biberón mágico con el que daba de comer a
mi Tumbelino ¡nunca se terminaba la leche! y cómo, por más que lo intentara, no
lograba averiguarlo … hasta que un día lo rompí. Descubrí el misterio pero me
quedé sin la magia de mi pequeño biberón. Tras la decepción ya no volví a
romper nada más.
Ahora, de mayor, hago lo
contrario. Intento arreglar los juguetes rotos y de paso aprender sobre su
proceso constructivo, sus materiales y técnicas. Es bastante gratificante
cuando lo consigues.
En el caso de la pequeña Anne (25
cms) el trabajo fue hecho por mi tía Tere quien le
confeccionó un nuevo cuerpo. En las fotografías estaréis viendo cómo llegó. Conservaba
la funda, la tela de color crema pero dentro solo estaban los alambres oxidados
de la estructura y la goma espuma totalmente pasada y convertida en polvo.
Descubrimos así que estas muñecas
en su versión niña y niño mantienen el espíritu de las primeras Kruse en cuanto
a los rasgos de las caritas y también en lo relativo a los cuerpos de tela.
Tere conservó la estructura
metálica que una vez limpia del polvo naranja y del óxido fue bien forrada.
Posteriormente ya se le pudo poner su funda una vez estuvo lavada. Esta imagen
que veis a continuación no refleja bien el aspecto final porque aún le puso
algo más de relleno.
En el caso de su hermanito el
cuerpo estaba en buen estado y no hubo que hacerle apenas nada. Posteriormente
los dos pasaron por la sección de costura y con unas telas antiguas y
basándonos en los diseños originales de estas moñas ¡voilá! quedaron acabados
(ains, les falta el calzado).
Y lo que también acaba es la
entrada de hoy, aaaaadiós.
La señora Kruse con algunas de sus bonitas muñecas
Como las
creaciones de Käthe Kruse me gustan mucho, la traje al blog hace un tiempo. La podrás
ver de nuevo en este punto.
¿Quieres
comentarme algo? estaré encantada de leerte, puedes hacerlo abajo. Aclaraciones,
aportaciones
y preguntas son bienvenidas
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