7 de noviembre de 2020

La casa de muñecas de la reina Mary, mucho más que una casa

 

Te propongo un viaje virtual a Londres, bueno, al castillo de Windsor que queda a un paso de la ciudad. Quiero volver a disfrutar de la casa de muñecas más bella que he visto nunca.


Ven, que te la mostraré y te contaré algunas cosas, sé que te va a gustar.


Para empezar, no se trata de una casa de muñecas al uso, en realidad ni tiene muñecas ni es para jugar, nunca lo ha sido aunque todo en ella sea pequeñito. Se empezó a construir en 1921 como regalo para la reina Mary, esposa del rey George V (abuelos paternos de la actual monarca). La idea partió de la princesa Marie Louise, prima del rey y amiga de la soberana que sabía que a esta le gustaban mucho las miniaturas.


Marie Luise se puso en contacto con el arquitecto Sir Edwin Lutyens que era una celebridad en su campo profesional y le propuso diseñar la casa. Mientras él se encargaba de planificar el edificio, ella – que estaba muy bien relacionada en el ambiente artístico inglés- se encargaba del interior.


La idea original pronto creció en volumen y en calidad debido en parte a razones sociales y políticas. Europa había pasado por la I Guerra Mundial cuyos efectos devastadores tardarían años en desaparecer. Al mismo tiempo la sociedad quería dejar atrás tanto dolor y sufrimiento, buscar entretenimientos. Reino Unido vivía una etapa de crecimiento y necesitaba volver a sentir el orgullo patrio: la casa de muñecas fue un resultado de este deseo. Se contactó con los fabricantes, artesanos, artistas y literatos más destacados del país, los más conocidos, los mejores. La créme de la créme del Reino Unido y de sus entonces colonias.


Tras meses de trabajo la casa de muñecas se terminó justo a tiempo para ser mostrada en la Exposición del Imperio Británico en Londres, en 1924. Más de un millón seiscientas mil personas pudieron admirarla y captar el mensaje que el supuesto juguete lanzaba al mundo: la fortaleza de la nación, la reafirmación de su industria y el orgullo por su cultura, su arte y sus gentes. Fue, por tanto, la estrella de la exposición. Un año después volvió a ser exhibida ante el público para finalmente viajar al palacio de Windsor donde se aloja desde hace casi cien años.



Pero ¿realmente es tan especial esta casa?  Sí, lo es, en muchos aspectos. Cada una de sus piezas fue donada por su creador y realizada con una meticulosidad fuera de lo común. Las fotografías que añado se quedan muy muy cortas para comprender la grandeza de la obra. Por ejemplo, en las imágenes acabamos de ver los dormitorios del rey en primer lugar y de la reina en segundo. Fijaos en las pinturas murales, los lienzos, las alfombras persas, los muebles, los objetos de tocador. Imaginaos pintando un retrato de la reina a escala diminuta ¡y encima haciéndolo muy bien! Os contaré que muchas de estas pinturas reproducen obras que a tamaño real cuelgan de las paredes de los palacios ingleses y de la catedral de San Pablo.


Si yo fuera liliputiense y pudiera elegir dónde vivir,  no me quedaría en estas habitaciones sino en la biblioteca, rodeada de los aproximadamente trescientos libros que la conforman. Allí no faltan obras de los mejores autores ingleses de todos los tiempos aunque la mayor parte fueron textos escritos e incluso ilustrados a mano por eminentes escritores de la época.




Varios de estos volúmenes incluyen relatos escritos ex profeso para la reina Mary y algunos se han reeditado recientemente para su venta al público. Hay hasta álbumes filatélicos con sellos diminutos ya que los reyes eran aficionados a este coleccionismo y sus gustos están presentes en cada habitación. Los periódicos que se leían en los años veinte del siglo pasado también tienen su espacio en esta maravillosa biblioteca.


Podéis ver con cuánto cuidado los coge una de las responsables del mantenimiento de la casa dentro del programa de vigilancia que se hace para limpiarla, arreglar piezas que se desencolan, etc. En la red encontraréis muchas más fotografías y vídeos relativos a estos trabajos, es un disfrute contemplarlos. Os invito a que en general busquéis imágenes de los pequeños objetos que no describo para no hacer la entrada aún más larga pero que vale la pena conocer.


Ah, otro detalle. Como los muebles y objetos de la casa son una muestra de lo que podría contener la vivienda de una muy acaudalada y moderna familia inglesa del momento, cuenta con dos ascensores, además de un Rolls Royce a escala que se guarda en el garaje junto a otros coches y motocicletas. Todo Made in Britain.


No podía faltar una sala de música o la habitación oriental que tanto gustaba tener a los aristócratas.


Por supuesto hay un cuarto para los niños con ecos de la India que se aprecian tanto en el empapelado de las paredes como en el pequeño tigre de juguete.


El impresionante comedor con la mesa bien dispuesta está preparado para dar un banquete en cualquier momento. Mientras tanto, en la cocina, se van preparando los platos que se servirán a los invitados.




Es tan grande la casa y tiene tantas habitaciones que el interior se disfruta desde sus cuatro fachadas. Protegida dentro de unas paredes de cristal, los visitantes la recorremos sin capacidad suficiente para fijarnos en tantos y tantos detalles pequeños, muchos de los cuales yo he descubierto después en la guía que compré.


Algunos datos prácticos antes de terminar. Os pido que os fijéis en la estancia de abajo, que da acceso al hall de la residencia. Es la misma que encabeza esta entrada al blog y una de las pocas fotografías que pude hacer. No se permite tomar imágenes de la propia casa de muñecas así que solo reproduje los grandes carteles que decoran el pasillo de acceso.


Importante, junto a la casa de muñecas de la reina Mary se exhiben unos juguetes de la actual reina Elizabeth y su hermana Margarita, pocos pero maravillosos, queda pendiente que hable de ellos.


Si planeáis una visita futura tened en cuenta que la entrada a esta parte del castillo está incluida en la que pagaréis por acceder al gran complejo de Windsor y que además os da derecho a repetir la visita al castillo cuantas veces queráis a lo largo de doce meses.


Será difícil que en la tienda no compréis algún objeto bello, la tentación es grande.


Y no os vayáis sin entrar en la capilla de San Jorge o St George´s Chapel, escenario de muchas ceremonias reales, entre ellas la boda del príncipe Harry y Meghan Markle.

Toda la visita al recinto lleva un buen rato, disfrutadla y quizá os pase como a nosotros, que caía la tarde cuando salimos.

Hasta pronto


*
Todas las fotografías con el nombre de mi blog están hechas por mí. En virtud de la ley de propiedad intelectual, está prohibido utilizarlas sin mi
 consentimiento. Si las necesitas ponte en contacto conmigo 😉.


* El resto de las imágenes son de la Royal Collection Trust.


* Te  puede interesar conocer los juguetes que se exhiben en el palacio de Kensington pinchando aquí.


* ¿Te gustan las casas de muñecas? tengo algunos ejemplos, bastante más sencillos pero con mucho encanto. Abre la casita de Mariluz aquí y si lo deseas escucha la conversación de sus habitantes en este enlace. Aún hay más, una pequeña casita de muñecas inglesa que descubrirás en este punto.

9 comentarios:

  1. Hola Linda, verás lo mucho que disfrutas si buscas fotografías y vídeos, yo pasé un buen rato preparando esta entrada y deleitándome con los muebles, los objetos decorativos ¡es que parecen reales! Ojalá puedas ir a verla en algún momento porque vale la pena la visita.
    Un abrazo desde mis juguetes y moñas.

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  2. Hola Anusca, qué maravillosa casa, me parece un verdadero tesoro, Las miniaturas me encantan y ya de este nivel son verdaderas obras de arte. Cuanto detalle y precisión, con una escala y proporción perfecta entre todos los elementos, me he quedado impresionada. El catálogo debe ser soberbio.
    Me encanta tu blog, Anusca, nos enseñas verdaderas maravillas. Muchas gracias por compartir.
    Besos.

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    1. Hola Ilona, me alegra volver a verte por aquí, enseguida voy a tu blog porque creo que hay nueva entrada (blog muy recomendado, os invito a daros una vuelta por él: ilonamiguarida).
      Así es, la casa de muñecas de la reina Mary es una obra de arte, cada elemento que la conforma lo es. Comparto contigo la admiración por las miniaturas, me parece un trabajo que necesita de mucha precisión, excelentes manos, paciencia, elección de buenos materiales para un resultado óptimo... Tengo compañeras coleccionistas que crean miniaturas y me deleito con sus creaciones así que ver esta maravillosa casa fue un plus.
      Sobre el catálogo, en realidad es pequeñito pero viene con muchas fotografías e irlas viendo y leyendo, sin prisa, saboreando cada imagen pues es otro plus, ja ja. Eso más buscar fotografías en la red, un deleite.
      Encantadísima de compartir, hasta pronto.

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  3. 😍😍😍 es una maravilla, no falta detalle... me encantan las casas de muñecas. Una entrada muy bonita... un saludo 😘

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    1. Gracias Al Desván, es estupendo que te guste la entrada ¿verdad que no le falta nada a la casa?. Un abrazo desde mis juguetes y moñas.

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  4. Muy buen artículo. Muchas gracias. Un trabajo estupendo

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  5. Buen trabajo. Un. Artículo estupendo. Muchas gracias

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    1. Gracias a tí por escribir, me alegro mucho que te guste

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