A estas alturas del calendario, el
árbol de Navidad lleva unos días montado en casi todas las casas. Los imagino
de todos los tamaños, colores y con mil tipos de decoraciones posibles. El nuestro tiene una decoración un poco especial.
Nada sorprendente tratándose del
árbol de una coleccionista ¿verdad?
Unos pequeños juguetes de
hojalata son los ornamentos que lo adornan, se trata de reproducciones de los
conocidos como penny toys o juguetes de penique.
Un penique es la centésima parte
de una libra esterlina para los habitantes del Reino Unido (lo que viene a ser
un céntimo de euro para nosotros) y era el precio que originalmente tuvieron
estos juguetes.
Los vendía gente que malvivía
en las calles e iba pregonando su mercancía a los transeúntes. Ancianos, niños
y discapacitados gritaban para hacerse entender y conseguir colocar algunos de
estos toys ganando unos pocos peniques.
Los compradores eran personas humildes
que no podían acceder a otro tipo de regalos para sus hijos pero aun así se las
arreglaban para llevar cierta ilusión a los pequeños de la casa.
Parece ser que los juguetes de penique
inicialmente fueron de madera y de cartón para hacerse posteriormente en
hojalata. La mayor parte se exportaban desde la pujante Alemania hasta el Reino
Unido. Su edad dorada se sitúa entre 1895 y 1914. El estallido de la I Guerra
Mundial interrumpiría de forma general la fabricación de juguetes.
Ya me gustaría que todos los que
tengo fueran originales pero no es así, en mi colección solo poseo algunas piezas
que no he incluido en estas fotografías. Los que os muestro son reproducciones
españolas (hay dos de Payá de los años 80-90), alemanas y chinas.
Como estaréis viendo, muchos
representan medios de locomoción porque los niños adoraban las novedades y el
periodo comprendido entre finales del siglo XIX y principios del XX vio nacer a toda clase de vehículos terrestres, aéreos y marinos que rápidamente fueron
trasladados al mundo del juguete.
También era habitual ver animales,
soldados a caballo y elementos del hogar como una bañera que os enseño aquí o
máquinas de coser, carritos de bebé, etc. Comodidades que iban haciéndose un
hueco en la vida doméstica.
Las principales fabricantes de
juguete en hojalata de nuestro país nos dejaron una buena selección de penny
toys que me pregunto si aquí se llamaron ¿juguetes de real? Tendré que investigar
…
¿Quieres comentarme algo? estaré encantada de leerte,
puedes hacerlo abajo. Aclaraciones, aportaciones y preguntas son
bienvenidas
Las fotografías de esta entrada están hechas por
mí (a excepción de la de los sellos y de la imagen de Theriaults). En virtud de la
ley de la propiedad intelectual está prohibido utilizarlas sin mi
consentimiento. Si las necesitas, ponte en contacto conmigo a través de este blog,
gracias 😉
Muy original, unos juguetes preciosos. Es muy agradable ver todos tus esfuerzos.
ResponderEliminarUn abrazo
Mercè
Se me ocurrió que, aprovechando que estos juguetes tienen su cordoncito, había que colgarlos y qué mejor que un árbol de Navidad, aunque sea algo falso, ejem ejemmmm
Eliminar